domingo, 19 de julio de 2009

APESTADOS*



*Miguel Grinberg
08.07.2009

Las plagas, las pestes y las epidemias son una realidad de la vida humana desde el principio de nuestra manifestación en la Tierra. Su impacto letal ha quedado documentado en textos históricos desde la antigüedad. Sin ir demasiado lejos, hubo serias epidemias en la Argentina: cólera (1867-8, 1887, 1894-5), fiebre amarilla (1870-1), viruela (1874) y peste bubónica (1899-1900). Algunas de ellas (en 1871) con miles de fallecimientos.

Ahora, en medio de una pandemia de gripe A, los epidemiólogos sostienen que el promedio de megainfecciones es de tres por siglo. Si revisamos el siglo pasado, encontramos la influenza española (1918-9). Luego, en la década de los 50, un grave brote de poliomielitis afectó al mundo con una tasa de mortalidad cercana al 40 por ciento. En nuestro país se notificaron unos 6.500 casos. La última epidemia argentina de cólera (enfermedad infecciosa intestinal) comenzó en 1992 y se notificaron casi 5.000 casos.

Durante el ciclo álgido de la polio, mientras no había en nuestros hospitales suficientes pulmotores para atender a los niños afectados, espantados vecinos de la Capital Federal baldeaban masivamente las veredas y las calzadas con disoluciones de acaroína (fenol), pintaban con cal los cordones y los troncos de los árboles, en tanto las mamás cosían pastillas de alcanfor en el cuello de las camisetas de sus hijos o les ponían ramitos de ruda bajo la almohada. En el caso del cólera –inducido por aguas contaminadas– se comprobó que gran parte de los tanques de agua de los edificios de departamentos estaban destapados, nunca habían sido desinfectados y contenían restos de ratas, gatos o palomas que se habían ahogado tiempo atrás. Los servicios sanitarios porteños no estaban equipados para los análisis químicos pertinentes y las autoridades municipales bonaerenses constataron que muchos camiones “atmosféricos” –extractores del contenido de los “pozos negros”– vaciaban sus cargas por la noche en las banquinas del conurbano.

No olvidemos que la pandemia más fatídica del presente es obviamente el sida. Las autoridades sanitarias mundiales estiman que en la actualidad hay globalmente alrededor de 35 millones de infectados con este mal. Que desde su eclosión en 1981 ha matado a más de 25 millones de personas. En nuestro país, el primer caso fue diagnosticado en 1982. El continente más afectado es África.

En cuanto a la actual gripe A, se comprende la alarma imperante. Basta con recordar que en octubre de 1918 la gripe española, extendida a todos los continentes, fue declarada pandemia mundial, y durante 18 meses actuó violenta y mortalmente. Cálculos moderados estimaron que sólo durante el semestre de mayor virulencia fallecieron 25 millones de personas. De ellas, 17 millones en India, 500.000 en Estados Unidos y 200.000 en Gran Bretaña.

Socialmente, todo indica que no se puede esperar el advenimiento de una peste para actuar de acuerdo con su virulencia sino que la salubridad pública demanda sólidas políticas preventivas. Se trata de un desafío estructural, no apenas coyuntural. El sistema hospitalario público de la Argentina no está preparado para epidemias tradicionales o novedosas.

Se suponía que los centros médicos de Estados Unidos estaban en la vanguardia, pero ya no es así. Durante las últimas dos décadas, bacterias comunes como el Staphylococcus aureus y especies del Enterococcus han desarrollado resistencia a los antibióticos más potentes y son la causa central de serias infecciones hospitalarias. Esto les sucede a dos millones de personas por año. El principal germen resistente a los antibióticos es llamado MRSA (estafilococo aureus resistente a la meticilina). En noviembre del año pasado, el diario Seattle Times sostuvo que seis de cada siete personas infectadas con MRSA lo contrajeron en un centro de atención de la salud. Mucha gente constató por primera vez la existencia del germen en 2007, cuando los centros para control y prevención de enfermedades anunciaron que las infecciones invasivas del MRSA abatieron por lo menos 18.000 vidas al año, más que el sida.

Males tradicionales como el de Chagas-Mazza, la tuberculosis o la hepatitis afectan anualmente a miles de personas sin que ello motive titulares en la prensa. Y no podemos ignorar que el dengue contraatacará el verano que viene. Ni que hay en la Tierra varias pestes nuevas a la espera de su oportunidad, como Ébola, la fiebre del Nilo o el mal de Marburg.

Entretanto, frente a Berazategui, las cloacas máximas de la Capital Federal y de parte del Gran Buenos Aires liberan constantemente en estado crudo toneladas de excrementos que emponzoñan el Río de la Plata. Esa bomba tóxica, fuente de pestes conocidas o por conocer, estallará algún día.

*Fuente:

http://criticadigital.com/impresa
/index.php?secc=nota&nid=27178


El gran engaño de la gripe A

La conocida "pandemia" de la gripe A es una gran mentira (en realidad exageración) de la prensa, organismos internacionales y estados.


Los fundamentos para esta afirmación son:


1) La cantidad de muertos en Argentina reconocida por esta "gripecita" al momento de escribir esto son de entre 100 y 200 según la fuente. Por su lado, los muertos en el año 2008 por la gripe estacional (la de todos los inviernos, la común, la que todos tuvimos) es de aproximadamente 4.000, en EE.UU aproximadamente 30 mil y en el mundo 500 mil. Entonces... ¿¿¿por qué en el 2009 nos alarmamos por una gripecita casi inofensiva y en los años anteriores ni nos enterábamos de estos muertos???


2) No es cierto que esta cepa (h1n1) tenga una tasa de mortalidad mayor a la gripe común: la misma es menor o igual a la influenza.


3) Llamarle pandemia demuestra un interés por alarmar a la población: Es cierto que en sentido estricto es una pandemia, porque se expandió a varios paises, pero esta palabra tiene una connotación alarmista. Con este criterio deberia llamársele pandemia a casi todas las enfermedades que existen en el mundo, ya que las mismas existen, muchísimas de ellas, en varios países.


4) ¿¿¿Por qué tener miedo??? Si uno supiera la cantidad de muertos por cáncer, accidentes de tránsito, infartos, tuberculosis, etc. y en general todas las causas de muerte, vería que es mucho más probable morir por cualquier motivo distinto a la gripe A. Así que esa gente que se asusta, y teme por su salud debería, tener más cuidado al cruzar la calle y no ponerse un barbijo. El temor es una sensación sin justificación lógica instalada por la insistencia desmedida del periodismo sobre el asunto. Ejemplo: enfermos de Chagas en Argentina 6 millones, sin embargo nadie vive con miedo a contraer esa enfermedad.


5) La gripe A existe desde hace mucho tiempo, y la cepa h1n1, también. La gripe A es y era la más exparsida, la mas común y habitual. La h1n1 tambien existió en Argentina. Es falso que sea algo nuevo, incluso hay prospectos de vacunas que dicen "contra la influenza A h1n1".


6) De los fallecidos, el 80% tenía enfermedades preexistentes que complicaron la gripe: Suponiendo que las víctimas letales sean 200, solo 40 de ellos estaban sanos, con lo que solo murió 1 de cada millón de habitantes sanos en Argentina.


Conclusión: Esta gripe es solo una más, incluso menos dañina que la de otros años. No es algo nuevo. No es alarmante. El temor de la sociedad es alimentado constantemente por los medios de comunicación (pero carece de razón). Ahora bien, existe la pregunta... ¿¿¿quiénes, por qué y para qué quieren alarmar a la sociedad??? Algunos dicen que hay intereses económicos, para vender Tamiflu. Tal vez fue algo que comenzó como una preocupación real, vieron que le daba rating a los canales de T.V. y la siguieron, Pero... ¿la OMS metida en esto? ¿Los estados? Sinceramente no sé cuál es el interés que hay detrás de este engaño, solo sé que es un engaño. Si tenés una idea podés comentarla, yo no lo sé. (Todos los datos se basan en fuentes que compartiré con quien las solicite.)


Transcripto de:

http://ladiosarazon.blogspot.com/




1 comentario:

  1. hola¡ yo escribi 2 textos muy cortos sobre este tema. mi opinion es mucho mas tranquilizadora que la tuya. te invito a q lo leas. saludos

    http://ladiosarazon.com

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